Bienvenido. Lee de abajo hacia arriba. O de arriba hacia abajo. O como quieras. O no leas.



lunes, 20 de diciembre de 2010

Instante


¿Ahí? No. Fue antes aún. ¿Desde cuándo? Desde el deliciosísimo día en que una mueca indescriptible me dijo que eras para mi. Por ti me puse mi camisa más bonita. Pero ni cuenta te das. No entiendes el lenguaje de mis risas, mis silencios. No sé qué decir. Mejor. No me parece. Pero...Nada de peros. ¿Cómo así? Yo no soy, ni fui, y hasta a veces creo que ni seré. Pero estuviste y estás...ojalá no estés nunca más. Sí. Opino lo mismo. No me importa lo que opines. Sólo no te mueras, pero vete lejos. Eso sí lo sé hacer. ¿Cómo has estado? Bien, qué gusto verte. Blablablabla. Me fui lejos. No lo suficiente. Han pasado años. Sólo en el calendario. Supéralo. Soy adicto a la tristeza, como tú a esa porquería. Lo estoy superando. Pero han pasado años. Sólo en el calendario. ¿Somos los mismos acaso? ¿Qué tiene que ver? No sé, digo. Di cosas que duelan, para sentir que en verdad estoy hablando contigo. ¿Herida abierta? Incurable. ¿Feliz? ¿Se puede? No sé. No sabes pues...nunca supiste. Y nunca sabré, ¿no? Algún día, cuando ya sea demasiado tarde. Ya es demasiado tarde. No, sigo vivo. ¿Y mientras? ¿No hay nada para ti? No. El zapatito que dejaron en mi fiesta no le calza a ninguna Cenicienta. No hay más. Nunca habrá.


Amor, la bebe te está preguntando si quieres jugo. ¡Ah!...sorry...me quedé....pegado. Si vi. ¿Qué pasó? No sé. Creo que soñé que no me atreví.


Atrévete...te-te...